miércoles, 13 de julio de 2011

Divinidad


Aún espero encontrar en algún sitio
mi atávica porción de alma divina,
ya que mi rostro es vulgar y mi carne
es de carne, mi cabello mortal y mi voz
una mezcla de aire y vibraciones.

Aún espero mi parte en el reparto
de semejanza y de imagen de los dioses. 

 
Porque lo único que tengo de divino es la impaciencia
y no sé si es fracción del poder o frontera.








© Ramón Ataz2011

6 comentarios:

  1. Ramón... ¡Me encanta!

    Ritmo, paradoja y sorpresa final.

    ResponderEliminar
  2. Un aporte más al fuego prometeico, del que participa toda creación. Un poema interesante.

    Abrazos.

    ResponderEliminar
  3. Muchas gracias, Anónimo. Por cierto, llevo tiempo siguiéndote por Internet y admiro sinceramente el encomiable esfuerzo que te supone dejar tantos comentarios en miles de foros y blogs, por no hablar de tu capacidad de trabajo.

    P.D. Por cierto, tengo un familiar cercano que se llama igual que tú.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Muchas gracias, Perfecto, por tu nuevo paso por mi blog y las generosas palabras que le dedicas al poema.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Me gustan los poetas con buen sentido del humor, jj
    Y tu forma de escribir es elevada.
    Te he conocido a través del blog de Carmen Iglesia y tienes un lugar a tener en cuenta verdaderamente.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. Que no se pierda el humor, jaja. Pues gracias a Carmen, a la que ya le debía mucho por lo que me animó en mis comienzos en esto de mostrar mis poemas en internet, y ahora le debo también haber contactado contigo. Muchas gracias por tus palabras y un saludo.

    ResponderEliminar