lunes, 15 de noviembre de 2010

MORIR



Morir, sí, como ascender derrotado;
implorar un día completo en la tibieza
de la ultramuerte renegada.
Sentir un cuchillo en el vientre
y una maza en el costado;
descender entonces a sus ojos
como un segundo desnudo.
Morir, morir en la cama o en el río,
seco o mojado.




© Ramón Ataz2010 (Juan Fionello)

2 comentarios:

  1. Un intenso poema sobre esa sensación de dejarse llevar por la desaparición, morir, ahhhh.

    Un gran lirismo en tus letras.

    Un beso
    Ana

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  2. Muchas gracias por tu fidelidad lectora, tú das vida a este blog con tus visitas. Y muchas gracias por lo que dices del poema.

    Un beso también para tí.

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