viernes, 11 de febrero de 2011
DESIERTO
Sudo una imagen, a medias
cartón piedra, azul desvaído,
brillos aquí y allá,
desierto relumbroso.
En suma, la que sedienta
me tira de la cama
hacia la negra vigilia.
Si la voluntad precediera a la vida,
habría intención en los visajes
de bestia acorralada que envío a los espejos
después de que la noche coagule los minutos.
Pero no hay fines ni objetivos,
solo botones en las púas de los peines,
y unos pocos deseos que me arrojan como un venablo,
incapaz de doblar en las esquinas.
© Ramón Ataz2011
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Excelente, Juan. Tu poesía tiene fuerza. Es vigorosa y está llena de aciertos.
ResponderEliminarUn abrazo
Ana
Mil gracias, Ana, y perdona por el retraso, pero cada vez parece que me queda menos tiempo para sentarme ante el ordenador...
ResponderEliminarUn abrazo.